Cien Pesos

February 21, 2009 by revolvermiserable 1 Comment

Por la calle camina hiriendo la vista, escandalosa y descuidada, aquella mujer vieja va desgarrando los ojos mientras avanza en su mundo propio, deteniendo al resto del mundo en su andar despistado, pateando postes, golpeando más gente que transita por las calles de Santiago. Y sin embargo sonríe, sonríe en una mueca arrugada y burlesca, retratando en ella al resto de la gente en sus propias caras grotescas, torcidas de desprecio y enfado, de indignación a veces, observando a esa mujer que camina y transita a diario las calles de Santiago, sin haberse peinado, sin saber hacia dónde la llevan con certeza sus pasos. Y con esa burlesca sonrisa en los labios, que no es más que una gran mueca despreocupada y honesta.
Por la calle camina descuidada, sucia, pobre y despeinada, aquella mujer vieja que hiere los limpios ojos de la multitud, que desangra el paisaje opulento de las calles de Santiago con su altanera presencia, y que ofende de tan alegre y despreocupada.
Zapatos viejos y gastados, poco que comer, poco que pedir, aquella mujer camina alzando su bastón amenazante, vigilando los rincones, espiando cada esquina, a cada caminante en busca de alguna ayuda, en busca de alguna lata o botella abandonada. Y en su eterno caminar de sobre vivencia miles de rostros opacos y tristes la cruzan, la asesinan de indiferencia y de hambre, aquella mujer vieja y gastada sonríe, sonríe por no llorar, pienso mientras corro hacia la calle con una moneda de cien pesos en la mano.